Con el paso de los años, los perros comienzan a mostrar señales de desgaste en sus articulaciones. La rigidez, la dificultad para levantarse después de descansar y la pérdida de energía son síntomas comunes que muchas veces asociamos únicamente a la edad. Sin embargo, existen suplementos como el colágeno, la glucosamina y la condroitina que pueden marcar una gran diferencia en su calidad de vida.
¿Por qué los perros mayores pierden movilidad?
El envejecimiento trae consigo la degeneración natural de los cartílagos y articulaciones. Esto puede desencadenar problemas como la osteoartritis, que provoca dolor y limita la capacidad de movimiento. Aunque es un proceso común, no significa que tu perro deba resignarse a vivir con dolor.
El papel del colágeno en la salud articular
El colágeno para perros es una proteína fundamental que actúa como el “cemento” que mantiene fuertes los huesos, tendones, ligamentos y cartílagos. En perros adultos mayores, su producción natural disminuye, lo que genera mayor fragilidad en las articulaciones.
Al complementar su dieta con colágeno hidrolizado:
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Se reduce la rigidez.
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Se promueve la regeneración del cartílago.
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Se mejora la elasticidad y fuerza de los tejidos.
En otras palabras, el colágeno ayuda a que tu perro vuelva a moverse con más comodidad.
Glucosamina y condroitina: aliados indispensables
Aunque el colágeno por sí solo ya aporta beneficios, su efecto es aún mayor cuando se combina con glucosamina y condroitina. Estos dos compuestos son conocidos por su eficacia en el tratamiento de problemas articulares:
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Glucosamina: estimula la reparación del cartílago y ayuda a reducir el dolor en articulaciones dañadas.
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Condroitina: favorece la retención de agua en los cartílagos, aumentando su resistencia y flexibilidad.
La sinergia entre colágeno, glucosamina y condroitina potencia la movilidad de tu perro senior, retrasando el avance de la artrosis y mejorando su calidad de vida.
Señales de que tu perro podría necesitar apoyo articular
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Dificultad para subir escaleras o saltar al sofá.
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Camina más lento o se queda atrás en los paseos.
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Se muestra rígido al levantarse después de descansar.
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Evita juegos o actividades que antes disfrutaba.
Si reconoces alguno de estos síntomas, es un buen momento para consultar al veterinario y valorar el uso de suplementos.
Un futuro con más vitalidad
Brindarle a tu perro adulto mayor suplementos de colágeno junto con glucosamina y condroitina no solo mejora su movilidad, sino que también le devuelve la alegría de moverse libremente. Así, podrá seguir acompañándote en paseos, juegos y momentos especiales con menos dolor y más energía.